Elegir la mejor residencia para tu perro ó gatos es esencial para que ella pueda sentirse como en casa, no sufra, no afecte a su salud y para que vosotros podáis disfrutar de unas vacaciones o atender a obligaciones personales, familiares o laborales sabiendo que vuestro mejor amigo está en buenas manos. ¿Qué hay que tener en cuenta para escoger el mejor lugar?
¿Puedo dejarlo en una residencia?
Lo primero que debes analizar es si tu perro es apto o no para quedarse en un hotel para perros.
Por lo general, si el animal está sano y emocionalmente equilibrado, podemos dejar a cualquier perro ó gato siempre y cuando expliquemos muy bien las características de nuestro animal a los encargados de la residencia. Aunque sí hay que considerar algunos aspectos.
Por ejemplo: ¿Es agresivo? En ese caso, hay que advertirlo a los responsables del centro y, bajo ningún concepto, lo juntarán con otros animales.Los perros con problemas de agresividad requieren un tratamiento especial y sólo es aconsejable dejarlos en centros donde tengan instalaciones apropiadas y personal cualificado.
¿Tiene miedos? Hay que explicar detalladamente a qué tiene miedo y cuáles son las situaciones en las que puede haber un problema: miedo a tormentas, a personas desconocidas, a otros perros…Se debe informar a los propietarios de la residencia qué deben hacer para que el animal pueda gestionar de manera adecuada la situación
¿Sufre ansiedad por separación? En este caso, los perros nunca deberían estar solos para evitar que aparezcan conductas indeseadas y que el animal no lo pase mal. Si esto no es posible, no es buena opción dejar a nuestro perro en esa residencia.
¿Tiene algún problema de salud? No es aconsejable dejar a un perro que tiene una situación de salud muy delicada o es muy anciano, si no estamos seguros de que le van a poder proporcionar el cuidado extra que necesita. Por otro lado, si sospechamos que pueda estar incubando alguna enfermedad o la padece y ésta es contagiosa, no debería dejarse en un lugar donde esté en contacto con otros perros y por supuesto avisarlo previamente por el bien de todos.
Si toma alguna medicación, es importante detallarlo a los cuidadores e, incluso, dejar por escrito la pauta y la dosis. Si la dolencia es crónica, o tiene algún otro tipo de problema, también hay que comunicarlo para que ajusten las rutinas a sus necesidades
Son unos consejos de nuestra veterinaria y Etóloga de la Fundación El Arca de Noé ,especialista en comportamiento animal.